Las personas que residen cerca de zonas verdes enferman menos y viven más años

Redacción

Estudios científicos recientes demuestran que las personas que residen más cerca de zonas verdes viven más y tienen menos riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, obesidad, problemas de salud mental y evitan efectos adversos del embarazo como podría ser el bajo peso de los recién nacidos.

El Dr. Mark Nieuwenhuijsen considera que "en buena parte esto es porque la gente practica más actividades físicas y establece más contactos sociales, con las implicaciones para la salud mental y física que conlleva". Nieuwenhuijsen coordina el proyecto Phenotype del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL) —centro de investigación de la alianza ISGlobal— y ha sido líder científico de las jornadas de debate Green Cities Healthy People. Planning Healthy Urban Spaces que han organizado B·Debate y CREAL los días 30 y 31 de octubre en Barcelona y en las que han participado unos 25 expertos nacionales e internacionales. El proyecto Phenotype, financiado por el 7º Programa Marco de la Unión Europea, tiene como objetivo evaluar e identificar actuaciones para determinar la capacidad de los espacios verdes públicos para dar respuesta a los problemas de salud tanto en núcleos urbanos como rurales.

Otras investigaciones sugieren que también se reduce la agresividad y la delincuencia, se mejoran los patrones de sueño y se produce una mejor recuperación de algunas enfermedades. Según la Dra. María Neira, directora del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que también ha participado en estos debates científicos, hay ejemplos concretos como el de la ciudad de Bogotá donde la ordenación del tráfico supuso una reducción de la violencia en los espacios públicos. Al disminuir el caos circulatorio se incrementaron las relaciones sociales y la seguridad con los consiguientes beneficios sociales en los colectivos más desfavorecidos.

Problemas de salud por la contaminación atmosférica y la inactividad física

La OMS calcula que en 2030 el 60% de la población mundial vivirá en áreas urbanas con la necesidad de planificación urbanística que ello implica. Durante la última década se ha podido observar un renovado interés en propuestas urbanísticas que den respuesta a los problemas de la salud. La inactividad física es uno de los problemas más importantes del siglo XXI ya que es responsable de la muerte de 3,2 millones de personas anualmente y tiene una gran influencia en las enfermedades crónicas más mortales: 21,5% de las cardiopatías isquémicas, 14% de casos de diabetes, 16% de cánceres de colon y 10% de cánceres de mama.

Además, el estrés y la contaminación atmosférica y acústica son factores cada vez más importantes en el estudio de las enfermedades. Según la Dra. Neira —lo explica en una entrevista en el periódico La Vanguardia— hoy en día podemos afirmar que "la polución es el segundo factor de riesgo para la salud" . Aproximadamente 7 millones de personas en el mundo mueren prematuramente debido a la contaminación atmosférica: 3,5 millones son por la contaminación en espacios interiores, por ejemplo por el uso de combustibles sólidos para cocinar, y 3,3 millones por la contaminación del aire urbano.

Las zonas verdes permiten reducir el estrés y ofrecen la oportunidad de realizar más actividad física, pero esto no es suficiente, "se necesitan otras actuaciones como potenciar el uso de la bicicleta, caminar o utilizar el transporte público".

El caso de Barcelona

Barcelona es una ciudad con una alta densidad. Comparada con otras ciudades como Madrid o Nueva York no tiene un gran parque central, pero si pequeñas zonas verdes y el Parque Natural de Collserola. "El problema no es si dispones de un gran parque o de muchos pequeños, sino si son accesibles y si la gente los utiliza", comentó Neira.

En palabras del Dr. Nieuwenhuijsen, las zonas verdes de Barcelona están en buenas condiciones y parques como el de la Ciutadella son realmente accesibles y altamente frecuentados. Sin embargo, añade, sería necesaria la creación de nuevas zonas verdes y continuar en la mejora de la planificación urbana que tenga en cuenta los problemas de salud de la población.

La creación de entornos saludables es una acción prioritaria de "Salud 2020", la nueva estrategia paneuropea de salud pública coordinada por la OMS. Los expertos que han participado en el B·Debate opinan que la única vía para crear áreas verdes saludables para las poblaciones urbanas es establecer planes estratégicos coordinados entre la investigación, la práctica de la salud pública y la planificación urbanística.

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