Pasar al contenido principal

En marzo del año pasado la pandemia de SARS-CoV-2 paraba la movilidad y la vida social en buena parte del mundo. Se cerraban espacios públicos, centros comerciales, oficinas y laboratorios, y la actividad económica disminuía de manera brusca en la mayoría de sectores. El mundo biotech y de la salud, en cambio, no se detenía, al contrario, intensificaba su actividad. Pero la pandemia ha obligado al sector a abrirse a nuevas maneras de trabajar que, en algunos casos, han llegado para quedarse.

Valerie Vanhooven, CEO de ONA Therapeutics, se encontraba en plenas negociaciones con inversores al inicio de la pandemia, en el mes de marzo. "Afortunadamente ya nos habían confirmado la financiación, porque es muy difícil que un inversor te dé dinero sin haberte conocido antes en persona. Las reuniones posteriores las hicimos online y fueron bastante bien. Creo que todos podemos estar de acuerdo en que una de las mejores cosas que ha llevado la Covid es que hemos aprendido a hacer videoconferencias y trabajar desde casa. "

El confinamiento afectó a ONA Therapeutics en tanto que tuvo que detener la actividad en el laboratorio y trasladarla a puntos del planeta libres de Covid. "Al final de la primera ola externalizamos algunas actividades en China porque allí ya tenían el virus bajo control". Ahora la compañía ya trabaja en los laboratorios del Parc Científic de Barcelona, donde tiene su sede, y los equipos están organizados en dos burbujas, de modo que si alguien tiene que hacer cuarentena, una parte del equipo pueda seguir trabajando.

Laura Soucek, fundadora y CEO de Peptomyc, explica que "el personal del laboratorio y de Peptomyc demostraron una capacidad extraordinaria para adaptarse a nuevos horarios y a una manera de trabajar diferente, lo que nos permitió seguir avanzando en los proyectos". Como aspecto positivo, Soucek destaca "haber aprendido que la cantidad absurda de viajes que tenía por trabajo se habría podido reducir significativamente sin impactar en la productividad y la comunicación. Cuando se pueda volver a viajar, me gustaría que fuera sólo cuando sea esencial. Será mejor para el medio ambiente y para mi salud y calidad de vida."

La industria farmacéutica también transformó radicalmente su día a día. Gemma Estrada, directora de Digital Health de Ferrer, explica que tuvieron que adaptarse "todos los ensayos clínicos en curso: evitando que los pacientes tuvieran que hacer visitas presenciales en el hospital, garantizando la entrega del tratamiento en los estudios ... ". Como punto positivo, la innovación abierta y el trabajo de la compañía con startups (en las iniciativas Ferrer4Future y Ferrer Open) ha propiciado nuevos proyectos digitales, "como plataformas para ayudar a los pacientes crónicos de forma remota", explica Estrada.

En el área de fabricación y logística también hubo cambios: "Al inicio de la crisis, cuando había escasez de todo, reconvertimos una de nuestras líneas de fabricación para poder producir gel hidroalcohólico" que se distribuyeron desde el Institut Català de la Salut. "También hubo que reforzar las líneas de fabricación de Gelocatil", explica Estrada.

Un nuevo impulso a la colaboración

En el Hospital Vall d'Hebron, como en el resto de centros hospitalarios de la BioRegión, tuvieron que multiplicar en un tiempo récord los recursos disponibles, pasando de 1.000 a 2.000 camas hospitalarias y multiplicando por cinco la capacidad de la UCI. También se transformó el modelo de trabajo de toda la organización. Un gran número de proyectos de investigación se interrumpieron y los equipos de investigación pasaron a focalizarse en la Covid-19. Laia Arnal, directora de Desarrollo de Negocio del Vall d’Hebron Institute of Research (VHIR) explica que, a pesar de todo, la pandemia ha provocado cambios positivos que se mantendrán: "Organizamos una Task Force de 150 investigadores de grupos diferentes con el objetivo de investigar sobre la Covid de manera transversal. La pandemia ha acelerado la colaboración entre las diferentes áreas del hospital, nos ha impulsado a utilizar los recursos de manera eficiente y efectiva, y a organizarnos rápidamente, eliminando tensiones competitivas internas ... ¡Hagámoslo de nuevo! Dentro de cuatro días habrá nuevas crisis en las que también necesitaremos colaborar: crisis climática, de ciberseguridad ... ". Arnal cree importante potenciar los nuevos modelos colaborativos transversales que han surgido entre el hospital, el mundo empresarial y la sociedad civil: "ha sido un movimiento extraordinario, muy bonito."

En el centro tecnológico LEITAT también han notado un impulso en el espíritu de cooperación entre organizaciones. Francesc Mitjans, director de Health & Biomedicine del centro, explica que "la pandemia ha incrementado el espíritu colaborativo de las empresas y otras entidades. Esta colaboración la hemos vivido directamente desde LEITAT, liderando iniciativas en tecnologías médicas, diagnósticos y terapias para la Covid-19. "

Cambio de modelo asistencial

La doctora Montserrat Muñoz, jefe de la Unidad de Cáncer de Mama en el Hospital Clínic de Barcelona, explica que la pandemia ha transformado totalmente su manera de trabajar: "El trabajo del día a día ha cambiado muchísimo. Antes estábamos siempre en el hospital, ahora hacemos teletrabajo tres días a la semana. Las reuniones las realizamos a través de Zoom y hemos incorporado nuevos profesionales al equipo que no he visto nunca en persona. En general, todo lo presencial ha disminuido mucho: las relaciones con los compañeros, con los pacientes ... Esta parte es la peor de la nueva situación ". Pero los ensayos clínicos no se han detenido: "Las pacientes nos han agradecido muchísimo que continuáramos. Para muchas es una oportunidad de tratamiento que de otra forma no tendrían. Es cierto que hemos visto que la participación ha disminuido un 20%.”

Algunos de los cambios implantados se mantendrán, como determinadas visitas telefónicas: "Las pacientes nos lo piden porque se ahorran el desplazamiento y la sala de espera". Sobre el teletrabajo, Muñoz cree que es posible que se mantenga en parte después de la pandemia. "Para mí es un aspecto muy positivo porque vivo a 40 km de Barcelona. Estoy menos cansada porque me ahorro el desplazamiento y dedico más horas al trabajo. Es un win-win ", asegura.

Teletrabajar o... desaparecer

El inversor y emprendedor Miguel Valls, managing partner del fondo de inversión Alta Life Sciences, cree que el teletrabajo ha llegado para quedarse: "es igual como el e-commerce: la pandemia ha acelerado estas tendencias 4- 5 veces. Estamos en un momento en que la mayor parte de actividades se digitalizarán, se robotizarán, o ambas cosas. Y si no formas parte de esta revolución, tienes un problema ... Desaparecerás rápidamente. Empresas como Twitter ya han dicho que implantarán el teletrabajo de manera permanente. "

En Ferrer, el teletrabajo también seguirá. La compañía ha aprovechado los meses en que todo el mundo trabajaba desde casa para remodelar las oficinas centrales. Según explica Estrada, cuando se vuelva a la oficina, la compañía implantará "un modelo híbrido a medio camino entre la presencialidad y el trabajo remoto. El nuevo diseño permite el trabajo transversal con equipos multi-disciplinares, donde se favorece la colaboración y la innovación, y el trabajo ágil."

Lo mismo pasará en LEITAT: "el teletrabajo se ha implantado como nueva modalidad de contrato laboral en algunos ámbitos de actuación, como en las tareas de gestión", explica Francesc Miralles.

Con todo, hay algunos aspectos que la digitalización no ha conseguido sustituir, como el networking. Según Laia Arnal, "establecer nuevas relaciones a nivel profesional sigue siendo muy complicado a nivel online. No hemos sabido encontrar alternativas para hacer contactos. Con el medio digital se ve mermada la capacidad de negociación, de crear nuevos contactos y de negociación. Hay menos creatividad, te falta información de contexto ... ". Con todo, Arnal es consciente de que habrá que adaptarse a esta realidad durante un tiempo: "hasta septiembre, como mínimo, todo pasará entre las paredes de mi oficina. Me resisto a pensar que, aún así, no haremos nuevos contactos internacionales. "

Alexis Roig, CEO de SciTech DiploHub - Barcelona Science and Technology Diplomacy Hub cree que la pandemia "no será el fin de un mundo interconectado. Al contrario, es una prueba más de nuestra interdependencia. Será clave articular mecanismos para seguir atrayendo talento al sector biotec en la era de la educación digital y el trabajo remoto. Visualizamos organizaciones y empresas virtuales con equipos ejecutivos distribuidos por todo el planeta, pero a la vez localizadas en ciudades punteras en ciencia y medicina traslacional como Barcelona. Esta podría ser la nueva normalidad en los próximos años. "

¿Necesitas más información?

Contacta con nuestro equipo

Contáctanos
silvia labe 2
Silvia LabéDirectora de Marketing, Comunicación, e Inteligencia Competitivaslabe@biocat.cat
Laura Diéguez
Laura DiéguezResponsable de Prensa y Contenidos(+34) 606 81 63 80ldieguez@biocat.cat
Suscríbete a nuestras newsletters

Toda la actualidad de Biocat y del sector de las ciencias de la vida y la salud en tu badeja de entrada.