Pasar al contenido principal

Expertos mundiales en inteligencia artificial se han reunido del 7 al 8 de marzo en CosmoCaixa para debatir sobre las promesas, los riesgos y la realidad de las aplicaciones de la inteligencia artificial. Convocados por B·Debate, una iniciativa de Biocat y la Obra Social “la Caixa”, junto con el Instituto de Biología Evolutiva (IBE - CSIC / UPF) y el Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial (CSIC), los expertos han impulsado un manifiesto que sirva de base para el desarrollo y el uso adecuado de esta disciplina en Europa.

La IA es clave en el desarrollo de coches autónomos, edificios inteligentes que ahorren energía, medicina personalizada y otras aplicaciones que pueden mejorar la vida humana, pero a la vez conlleva riesgos y retos. Según los responsables, la declaración pretende sensibilizar a la sociedad de los beneficios y los riesgos que implica el desarrollo de la inteligencia artificial y comprometer a quien la diseña, implementa o utiliza con principios de prudencia, transparencia, responsabilidad y fiabilidad.

Los expertos ponen de manifiesto que el buen uso de la inteligencia artificial será clave para mantener el bienestar de la sociedad, sobre todo en un contexto de postverdad en que la emoción y las creencias tienen más influencia que los hechos objetivos en la toma de decisiones. Esto es especialmente importante a la hora de afrontar las grandes cuestiones actuales de la sociedad como el cambio climático, la contaminación o la migración.

La declaración –impulsada por Luc Steels, profesor de investigación ICREA, y Ramon Lopez de Mántaras, del CSIC– hace un llamamiento a las agencias y empresas de financiación europeas para que inviertan en el desarrollo de la inteligencia artificial, dada la importancia que tiene para el futuro de la economía. Sin embargo, resalta que hay que hacer investigación a largo plazo para ver las posibles aplicaciones de la IA y con qué requisitos debe aplicarse para que los resultados no sean perjudiciales. El manifiesto sugiere la creación de una agencia europea que valide las aplicaciones antes de su uso generalizado. La declaración será publicada en las próximas semanas y estará disponible online.

Los expertos también han hecho hincapié en la creciente preocupación por los chat-bots, sistemas de mensajería automática que se hacen pasar por seres humanos y operan en Internet y en las redes sociales para manipular la opinión política, propagar hechos falsos o extorsionar. Proponen una posible solución, que sería exigir que siempre esté claro si una interacción proviene de un ser humano o de un sistema de IA y que pueda ser rastreado e identificado.

 

Más información en la web de B·Debate.

El debate se puede seguir en Twitter a través de las etiquetas #BDebateAI y #BDebate y a la cuenta @BDebate.

 

Te puede interesar:

Suscríbete a nuestras newsletters

Toda la actualidad de Biocat y del sector de las ciencias de la vida y la salud en tu badeja de entrada.