"Una 'start-up' creada por investigadores es una ocasión única para desarrollar fármacos innovadores"

Santiago Esteban y Laura Nevola
Doctor en Ciencias Químicas (Universidad de Valencia), Santiago Esteban se ha centrado en métodos computacionales para el estudio de proteínas en centros nacionales (IRB, BSC) e internacionales (Alemania y Holanda). Laura Nevola es licenciada en química médica y doctora en Ciencias Farmacéuticas (Universidad de Roma). Su especialidad, que ha llevado a cabo en universidades de Roma, en Yale y en el IRB de Barcelona, ha sido el desarrollo de moléculas para modular la función de proteínas.
IDP Pharma, que acaba de cerrar una segunda ronda de financiación y ya ha captado 2 millones de euros desde su fundación en febrero de 2015, desarrolla fármacos que actúan sobre nuevos mecanismos de acción implicados en el desarrollo del cáncer, en particular en mieloma múltiple.
Los fármacos están dirigidos a una nueva clase de diana terapéutica que son las proteínas IDP. La empresa también desarrolla tecnología propia y específica para el diseño de estos fármacos, que les permitirá introducir nuevos tratamientos en el mercado.
¿Por qué quisiste ser emprendedor/a?
- Santiago Esteban: Tras doce años trabajando en investigación básica en el sector de la biomedicina, mis prioridades pasaron de generar a explotar el conocimiento. IDP Pharma comienza tras la toma de consciencia de que era el momento de aprovechar el conocimiento generado durante 20 años en una nueva clase de diana terapéutica, las proteínas IDPs, y transformarlo en nuevas terapias. Siempre me ha gustado ser partícipe de los cambios, así que este gran paso no podía darlo si no era a través de una apuesta personal y con un equipo comprometido.
- Laura Nevola: La razón fundamental radica en mi necesidad de transformar el conocimiento en tecnología, y para ello es esencial distanciarse del mundo académico. En mi caso, mi formación me lleva a apostar por el desarrollo de fármacos innovadores, con el objetivo de introducir nuevas terapias para el tratamiento del cáncer. Estoy convencida que una start-up creada por investigadores formados y con experiencia como nosotros es una ocasión única para poder contribuir a este proceso de manera relevante.
¿Cuál ha sido la decisión estratégica más importante que has tomado hasta ahora?
- S.E: Entender que un proyecto de esta magnitud no es cosa de unos pocos. Esto nos ha llevado a establecer alianzas tempranas con otros profesionales del sector. Los acuerdos que gozan de salud son aquellos en los que todos se comprometen y todos ganan.
- L.N: Establecer las posibilidades de éxito técnico de los distintos proyectos a desarrollar por la empresa, priorizando aquellos que nos permiten avanzar, al tiempo que preparamos los proyectos con mayor grado de innovación.
¿Cuál es el mejor consejo que te han dado?
- S.E: “Pon un químico médico en tu vida”.
- L.N: En realidad fue una frase que me dijeron en varias ocasiones y que interpreté como un consejo. Antes de decidir si empezar esta aventura, cuando explicaba el proyecto a distintas personas (familiares, amigos, compañeros de trabajo) muchos me decían: "A mi ya me has convencido". Me ayudó a entender que ya estaba segura de lo que tenía que hacer.
¿Y ahora qué? ¿Qué metas te has marcado alcanzar a corto plazo?
- S.E: La fase de “estabilización” en la que nos encontramos es el paso previo a nuestro crecimiento. Tenemos que preparar la empresa para hablar un idioma internacional, es decir, dar entrada a inversores extranjeros.
- L.N: Estamos en un punto muy importante, el próximo año es crucial. Como me gusta decir, “tenemos los actores y el presupuesto para poder rodar la escena”. Queremos avanzar rápidamente para completar los estudios en modelos animales y, al mismo tiempo, empezar nuevos programas de descubrimiento. Consolidar la empresa es nuestro objetivo.